Puede que tu madre se haya casado siete veces. Puede que alguna vez, en un ataque de ira, te haya amenazado con un cuchillo. Puede, incluso, que se pasee por la casa en pelota picada.
Pero que sucedan todas estas cosas a la vez es anormal.
Puede que tu madre se haya casado siete veces. Puede que alguna vez, en un ataque de ira, te haya amenazado con un cuchillo. Puede, incluso, que se pasee por la casa en pelota picada.
Pero que sucedan todas estas cosas a la vez es anormal.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies
ACEPTAR