Uno de mis personajes favoritos de Hoy no puedo es Marta, que aparece en el relato «El nivel 3». Esta es la descripción de Marta, casi al comienzo de la historia:
…y mucho menos Marta, que reía a carcajadas mostrando sus dientes blancos. Tiene los dientes pequeños, enfilados, como los pájaros sobre un cable eléctrico tras una tormenta de verano. Solo un canino rebelde se monta un poco sobre un incisivo. ‘Por tomar biberón hasta los cinco años’, suele explicar haciendo el gesto con la mano de llevarse un biberón a la boca; luego junta los labios, como si succionara. Ella es la única mujer de la planta de control de calidad en una profesión masculinizada, pero para todos nosotros es uno más. Al principio no fue así: aunque nadie lo verbalizaba, la presencia de Marta nos resultaba incómoda, como si un agente patógeno hubiera entrado en nuestro cuerpo y amenazara nuestro equilibrio homeostático, por lo que al comienzo de llegar ella nadie en el café se atrevía a contar chistes verdes o a levantar la voz.
Hasta que Marta eructó. Un día bebió un sorbo de café y eructó.
Y luego juró en arameo.
Pues tengo que revelaros que una de las imágenes que describe al personaje de Marta está inspirada en esta canción de Quique González (versión en directo con los Taxi drivers): «Pájaros mojados». En el momento en que la oí supe que, si alguna vez escribía un libro, uno de sus personajes tendría los dientes enfilados, como pájaros tras una tormenta de verano.
3 comentarios
Gran canción. Pero más que la descripción de ella, que me parece muy buena, me quedo en ese momento en el que se rompe la barrera que tenían sus compañeros con ella con algo tan inocente y espontáneo: “Hasta que Marta eructó. Un día bebió un sorbo de café y eructó.”
Grande Quique!! Todos los pájaros estábamos mojados enfilados en la cuerda de tender : )
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